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viernes, 5 de febrero de 2010

Vientos de cambio

Apocalipsis, los últimos tiempos. ¿Es usted salvo de la ira venidera?

Desde este espacio pretendemos en primer lugar predicar a Jesucristo como Único Camino a Dios Padre.

1Ti 2:5 Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre,

En estos tiempos vemos a algunos levantarse como “hombres de Dios” cuyo comportamiento y doctrina (enseñanza) es falaz aún para los mas desprevenidos.
Sus seguidores argumentan que estos estafadores del bolsillo y del espíritu son “hombres de Dios” por la sencilla razón de ser seguidos por multitudes.
A la luz de la Palabra del mismo Jesús en los Evangelios esto no es un argumento válido y mucho menos sólido como para afirmarse.

Mateo 24:11 Y muchos falsos profetas se levantarán, y engañarán a muchos;
24:12 y por haberse multiplicado la maldad, el amor de muchos se enfriará.

Una de las primeras preguntas que se hacen los que los siguen cuando alguno habla de estos encumbrados adoradores del dinero disfrazados de pastores es la siguiente: ¿Cuántos son en tu congregación? Así entran en la falacia y dan por sentado que si son seguidos por multitudes serán aprobados por Dios.
¡¿Quién dijo que ser seguidos por multitudes es una demostración del respaldo de Dios a estos embaucadores del diablo que siguiendo sus propias concupiscencias arrastran hacia el error y la perdición a los que lo siguen?!

2Pe 2:18 Pues hablando palabras infladas y vanas, seducen con concupiscencias de la carne y disoluciones a los que verdaderamente habían huido de los que viven en error.

Los tiempos actuales son tiempos para extremar los recaudos y no creer en cualquier cosa ni andar revoleando amenes a cualquier cosa que diga aún el más fiel de los predicadores. ¡La Palabra de Dios tiene que ser la regla y la guía!

Judas 1:3 Amados, por la gran solicitud que tenía de escribiros acerca de nuestra común salvación, me ha sido necesario escribiros exhortándoos que contendáis ardientemente por la fe que ha sido una vez dada a los santos.
Jud 1:4 Porque algunos hombres han entrado encubiertamente, los que desde antes habían sido destinados para esta condenación, hombres impíos, que convierten en libertinaje la gracia de nuestro Dios, y niegan a Dios el único soberano, y a nuestro Señor Jesucristo.

No nos cansaremos de denunciar una y otra vez a su exponente más nocivo y contaminante: Benny Hinn. Quien no solo levantó un ministerio plagado de falsedades sino que tiene dos casos de muertes por sobredosis de heroína de dos de sus colaboradores.
Es realmente increíble que esto no haya sido esclarecido como otras tantas cosas y que los que dicen ser creyentes en Cristo lo sigan ciegamente.
Han entrado con sus falacias, sus medias verdades y con su falsa enseñanzas; haciendo que aquellos de buena voluntad que los siguen sufran hasta que sean advertidos por el Espíritu Santo del error de seguir la doctrina del falso profeta Balaam, que entre otras cosas es la adoración al dinero. Esto sin decir de su relación con lo demoníaco y la masonería de la peor calaña.
Han formado un equipo de blasfemadores del Evangelio, y esto tuvo alcance mundial.
Es llamativo que a estos estafadores los sigan y aún es más asombroso que quienes los siguen los defiendan a capa y espada argumentando que “llevan frutos para Dios…” Alegan sanidades y otras cuestiones grandilocuentes, cuando no la consabida prosperidad económica que todo creyente tendría que ostentar, eso sí para que estos creyentes prosperen tendrán que dejar el diezmo y la ofrenda en las arcas de estos simuladores.
Es notorio también que estos mismos “prosperados” en algún punto se dan a conocer y muestran quienes son su aliados. Viajan al Vaticano que es uno de los exponentes más contundentes de la masonería y de prácticas extrañas al cristianismo; y sostienen que Wojtyla (llamado Juan Pablo II) era un ungido de Dios -Benny Hinn-, o que era el personaje espiritual del siglo -Billy Graham, el aprobador y bendecidor de bombardeos yanquis-.

Billy Graham, se dice que es masón grado 32. A juzgar pòr su aprobación a las guerras y a su visita la Vaticano...

El impresentable falso profeta Benny Hinn junto a Wojtyla demostrandole su reverencia y reconocimiento

Lamentablemente, y esto parece ser un mal de nuestra condición humana, necesitamos seguridad y es por esto que una y otra vez levantamos organizaciones que convaliden nuestra fe: ¡Otra falacia!
Las organizaciones pequeñas dieron lugar a las medianas y estas a las grandes, luego se asociaron las grandes zonalmente y dieron a luz a las mega organizaciones.
Las mega organizaciones dieron lugar a estos estafadores y muchos de los más encumbrados líderes fueron a buscarlos para traer la unción a la Argentina.
Las organizaciones no fueron la voluntad de Dios sino que su voluntad fue y es levantar y edificar un cuerpo: Su iglesia.
Sin embargo, nosotros en nuestra necedad levantamos organizaciones, denominaciones, asociaciones, convenciones, etc, etc, etc...
Luego vino la asociación de la asociación; y después la convención de la asociación de la asociación; más tarde la federación de la convención de la asociación de la sub-asociación de la subconvención, y esto hay que multiplicarlo por todas las asociaciones y denominaciones que hay en el planeta tierra.
¡¡¡Un bochorno para nosotros los cristianos!!! ¡¡¡Vergüenza debiera darnos!!!
Desde este blog creemos que Dios mismo está harto de semejante división en el cuerpo de Cristo.
Si ya el Espíritu Santo estaba en las primeras épocas de la iglesia reprendiendo por medio de su apóstol San Pablo a los corintios en cuanto a divisiones, ¿Por qué pensamos nosotros que Dios mirará para otro lado y será permisivo ante nuestra necedad y error?

1Co 1:10 Os ruego, pues, hermanos, por el nombre de nuestro Señor Jesucristo, que habléis todos una misma cosa, y que no haya entre vosotros divisiones, sino que estéis perfectamente unidos en una misma mente y en un mismo parecer.
1:11 Porque he sido informado acerca de vosotros, hermanos míos, por los de Cloé, que hay entre vosotros contiendas.
1:12 Quiero decir, que cada uno de vosotros dice: Yo soy de Pablo; y yo de Apolos; y yo de Cefas; y yo de Cristo.
1:13 ¿Acaso está dividido Cristo? ¿Fue crucificado Pablo por vosotros? ¿O fuisteis bautizados en el nombre de Pablo?

¿Entonces el camino es el ecumenismo? No, no creemos esto.
Simplemente decimos que estamos intuyendo en nuestro espíritu que vienen tiempos difíciles como lo venimos diciendo en otras entradas y que esta falsa estructura organizativa ha dejado claro que era falsa y que a su vez está agotada.

El planeta entero está entrando en la trampa final de Satanás quien prepara la próxima entrada en escena de su inicuo hijo: el anticristo.

Esta estructura de organización actual de la iglesia será dejada de lado por Dios.
Porque no respeta la enseñanza bíblica en cuanto a iglesia como cuerpo, es decir como organismo, con el respeto al sacerdocio de todo creyente y al desarrollo de cada ministerio sin necesidad de que haya un sacerdote con el mote de pastor, por quien pasan todas las decisiones.
Dios va a desechar a esta estructura y la va a desarticular, ya lo está haciendo.

¡Viene otra forma de congregarse diferente de la actual y será según el modelo bíblico como siempre tuvo que haber sido!

Vienen tiempos difíciles y algunos afirman que en breve la iglesia será purificada por el fuego de la persecución.
Sea como sea, que nos encuentre velando y orando para que seamos tenidos por dignos de estar en pie delante de Jesucristo.

Lucas 21:36 Velad, pues, en todo tiempo orando que seáis tenidos por dignos de escapar de todas estas cosas que vendrán, y de estar en pie delante del Hijo del Hombre.

Isaías 55:6 Buscad a Jehová mientras puede ser hallado, llamadle en tanto que está cercano.
Isa 55:7 Deje el impío su camino, y el hombre inicuo sus pensamientos, y vuélvase a Jehová, el cual tendrá de él misericordia, y al Dios nuestro, el cual será amplio en perdonar.

Juan 3:16 Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.

¡Cuidate!
¡Dios te bendiga!

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